
Cientos de Elefantes en Tailandia dedicados al turismo, son liberados de sus sillas metálicas a causa del coronavirus.
Si has viajado a Tailandia, sabrás que no es difícil encontrar elefantes «amaestrados» que son utilizados para pasear turistas sobre su lomo. Para ello, sus cuidadores se valen de unas pesadas sillas de metal, que colocan directamente sobre la piel de los animales, haciéndoles trabajar así a diario.
Sin embargo, a causa del coronavirus, el turismo se ha desplomado por completo en Tailandia, como en el resto del mundo. Los centros turísticos, denominados «campamentos de elefantes» como el de Chiang Mai que alberga 78 elefantes o los situados en Phuket, que recibían cientos de visitantes cada día, hoy permanecen cerrados al público. Por ello, los elefantes han sido liberados de sus cadenas y las sillas desmontadas de sus lomos.
Esta noticia que sin duda para ellos es fantástica a corto plazo, puede sin embargo convertirse en un serio problema en cuestión de días o semanas, ya que el coste de alimentar a un grupo de estos grandes herbívoros puede ascender hasta 1.5000 euros al día según afirman sus cuidadores. Un solo elefante puede llegar a comer más de 300 kilos de materia vegetal al día, por lo que en breve, estos paquidermos podrían tener serios problemas para abastecerse e incluso algunos morir de hambre. Algunos campamentos como el de Mesa en Chiang Mai han decidido trasladarlos hacia el norte, donde es más fácil encontrar alimento para ellos.
Pero no solo los animales tendrán problemas, también se avecinan tiempos muy difíciles para sus cuidadores, quienes están comenzando a ser despedidos por decenas, ante la ausencia de ingresos. En este vídeo puedes ver cómo se vive el ambiente en un campamento de elefantes tailandés a causa del Covid-19:
https://www.youtube.com/watch?v=WuKjodPrJaY
Licenciado en Marketing y Gestion Comercial. Desde hace mas de 5 años me dedico a la generación de contenido de animales y mascotas. Soy un apasionado del mundo animal , siendo los roederes mi autentica pasión. Tengo hamsters, un hurón y recientemente uní a mi familia una cobaya adoptada.



